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Estatuas, muchas estatuas. La segunda parte del recorrido tiene lugar en el jardín de las estatuas de Canterlot, justo detrás del castillo real. Uno de los lugares más visitados de la capital. Twilight explica el origen y significado de las estatuas, muchas de ellas a memoria de héroes y heroínas del pasado. La mayoría pone suma atención a sus palabras, aunque una pareja de unicornios la ignora completamente. Estas dos unicornios se encuentran al final del grupo, platican sin escrúpulo alguno.

Una unicornio rosa y la otra de pelaje azul claro; de vestidos elegantes, caminando de forma engreída, ambas de clase alta. Hablando sobre frivolidades, al parecer se llevaban muy bien pues lo que más tienen en común es su estatus social. Purplethink está detrás de ellas y escucha todo lo que dicen, eso no le interesa, a él lo que le molesta es su falta de respeto. A pesar de su descontento no se atreve a decirles nada.

También tiene otro problema que lidiar. Longhorn constantemente expresa su déficit de atención y se desvía del camino con frecuencia. Purplethink actúa de niñera y lo obliga a regresar al recorrido. Al poni terrestre le gusta escuchar las palabras de una de sus ídolos y Longhron lo hace casi imposible. Cuando Twilight cuenta una breve historia de Nightmare Moon, Purplethink queda decepcionado porque su compañero no lo deja escuchar. Longhorn voltea la cabeza de un lado a otro, hasta que encuentra lo que quiere.

Longhorn se detiene en la estatua de la Princesa Celestia, ignora los comentarios rogones de Purplethink sobre ser buenos invitados. La estatua, de igual tamaño que la princesa original, con las patas delanteras alzadas en una posición de victoria. Su corona y collar son de oro y diamantes. Purplethink y Longhorn se habían separado del grupo.

-¿Por qué no puedes comportarte? -Purplethink, temeroso de que su compañero cometa alguna estupidez.

-Tu tranquilo... que nada malo va a pasar. -Su voz calmada, con una actitud algo sospechosa. Permanece observando la estatua de Celestia por algún tiempo. Sonríe maliciosamente- Mmmmmm... ¿Qué es lo más estúpido y loco que has hecho en tu vida?

-No lo sé, ¿Aceptarte como compañero?

-Veo que recuperaste tu arcaico sentido del humor. ¿Tu cámara aún sirve?

-Por supuesto... ¿Por?

-Al parecer eres un buen fotógrafo, una de las razones por las que te elegí como compañero. Ahora necesito tu ayuda-. Longhorn sube a la base de la estatua, haciendo caso nulo a las protestas de su compañero implorando que baje y sea más consciente.

-¿¡Qué haces!?

-Mírala bien. Cuando era un pequeño potro alguna vez escuché por accidente la conversación de algunos ponis adultos que estaban construyendo una casa cerca de la mía, todos decían que la princesa tenía una figura muy seductora... y realmente tenían razón.

-¡Me estas asustando, bájate ya o me meterás en problemas!

-No te daré el crédito por esto. -Sube al lomo de la estatua y simula estar montando a Celestia como un auténtico vaquero-. ¿Qué esperas? ¡Tómame una foto!

-¡Por el amor de Celestia! ¡Baja de ahí!

-El amor de Celestia... eso sería interesante. Mejor toma ya la foto porque entre más tiempo te tardes más tiempo me quedaré.

Purplethink, sin opciones, algo resignado. Toma su cámara, apunta y toma la foto. Lo hace lo más pronto posible. Su timidez le hace malas jugadas al no tener la suficiente fuerza para obligar a Longhorn comportarse o simplemente alejarse de él. Espera que ningún guardia o la misma Celestia lo esté observando. La siguiente foto sube el nivel de burla, simula besar la estatua de Celestia, justo en el hocico.

-¡Maldito potro demente! ¿Por qué haces esto? -Purplethink, con el terror de sus cascos, es cómplice directo de tal afrenta. Le tiemblan las patas traseras.

-No te esponjes, que solo es un juego. Unos amigos apostaron una gran cantidad de dinero si les mostraba evidencias sobre esto. Realmente lo vale.

-Si te atrapan te pueden matar.

-No seas... no exageres. Unas cuantas fotos más. -Longhorn, rehusándose a solo unas cuantas fotografías. Cada momento que pedía capturar era más atrevido que el anterior. Incluso Longhorn en una fotografía obliga a Purplethink a participar.

-¡Ya tienes lo que querías! ¡Ahora por favor, vámonos de aquí!

-Una más y serás liberado. Lo mejor es al final. -Longhorn, camina hacia la retaguardia de Celestia, expresa una cara de excitación y pone sus cascos en el trasero de Celestia. Purplethink se tapa los ojos y aleja la vista.

-No puedo creer lo que estás haciendo.

-¿Qué parte de "esto es un juego y una apuesta" no entendiste? Además, niégame que el plot de Celestia no es bueno. ¡BAH! Cuando estés solo y vejo recordarás esto y te mantendrá con algo de felicidad en tu amargado y mojigato corazón -Longhorn no escucha objeción-. ¿Ves? Dale alguna locura a tu vida, apuesto que no has hecho ninguna. Toma la foto y te dejaré en paz.

Purplethink, sin opciones, toma la foto. Ni siquiera tiene claro del porqué sigue acompañando a este ser tan problemático. Hay una disparidad en sus pensamientos: por un lado el enojo, el estrés y el miedo a ser descubiertos; por otro la situación tan peligrosamente divertida y loca que estaban cometiendo. Dentro de su cuerpo hay una grande carga de risa queriendo salir por esta peligrosa situación.

-¿Qué están haciendo? -La voz de la autoridad, le provoca pánico a Purplethink, casi lo hace orinarse del susto. Longhorn también se sorprende y cae de la estatua. Un silencio absoluto, un momento tan embarazoso. Purplethink no se atreve a mirar hacia atrás, sabe de quién es la voz y siente una molesta decepción a sí mismo. Longhorn en cambio se levanta rápidamente y cortésmente saluda a todos esperando así mitigar la situación. Twilight es quien les ha hablado, espera la respuesta de Purplethink-. ¿Y bien?

Twilight estaba preocupada porque una pareja desapareció de su guardia. Busca en el jardín de estatuas y los encuentra "jugando" de manera ofensiva con la estatua de la gobernante máxima de Ecuestria. Twilight está molesta y cuando ella está molesta puede sentirse el peligro de una sanción (generalmente moral). Purplethink siente el descontento de la unicornio, en este momento la vergüenza es en lo único que piensa. No se atreve a hablar, permanece quieto como su vida dependiera de ello.

Detrás de Twilight están los demás estudiantes, la mayoría mira sus acciones con mal ojo.

-¿Qué no se van a mover? Hay camino por recorrer. -Lo siguiente se lo dice a solo a Longhorn y a Purplethink, especialmente al último-. Son estudiantes, no son vándalos. Habrá consecuencias por sus acciones, se disculparán con Celestia por su actitud. Esperaba más de ti, estoy decepcionada.

Twilight se aleja con el resto de los estudiantes. Purplethink está con el sudor frío.

Longhorn también escucha las palabras juzgantes de Twilight, solo para Purplethink. Sabe que no debe bromear con esto, la culpa lo vence, sabe que se sobrepasó, está vez fue muy lejos. Lo que menos quería era afectar a Purplethink. Necesita absolverlo de la culpa, pero ahora solo le queda disculparse con él.

-Purplethink... yo no quería que esto pasara. No me...

-Te odio. -Purplethink, su única oración expresa más de lo que siente.

Recuperar el respeto de Purplethink será un trabajo arduo.

Nada mal para arruinar la relación de amistad todavía en proceso de consolidación. Longhorn a veces no mide las consecuencias de sus acciones, razón por la cual se ha metido en muchos problemas. Hay una razón, su razón personal por la cual eligió a Purplethink como compañero, no se la dice a Purplethink porque espera que el mismo se dé cuenta.

Purplethink se molesta más cuando escucha el insulto de una unicornio, una de esas ponis de clase alta que hacía caso nulo a las explicaciones de Twilight. Claramente escuchó a la unicornio rosa decir: "Pobres estúpidos, no se porque invitan a ponis que no valen la pena". El insulto se clava profundamente en su orgullo.

El paseo por la estatua llega a su fin cuando los ponis ven una estatua especial y muestran un gran interés hacia ella.

Todo poni detiene su paso, nadie expresa palabra alguna, solo miran con extraordinario interés. Hay un cierto temor en sus ojos, saben quién el ser al que refiere la estatúa. Una figura de piedra que a simple vista es una estatua hecha con el residuo de diferentes seres, un deformado ser con apariencia de una serpiente mutante. Esa figura irregular aún sigue con "vida", espera despertar y deleitarse con el sufrimiento ajeno. Le encanta causar estragos, le fascina hacer que todos pierdan la cabeza. Twilight Sparkle lo mira con seriedad también, su imagen le trae recuerdos amargos.

-Háblanos de esta estatua. -Exclaman casi al mismo tiempo unicornios y pegasos. Twilight sonríe, les da entonces lo que quieren. Purplethink, ansioso por escucharla, se entromete entre los demás para llegar al frente.

-Todos saben quién es... no hace más de 7 años que volvió a despertar. Ecuestria casi fue destruida.

-¡Dinos como lo derrotaste!

-¿Derrotarlo? No pude hacerlo sola. Ningún poni puede derrotarlo, a veces los ponis recuerdan un solo nombre pero se olvidan de los pequeños héroes que les ayudan en su trayecto. Mis amigas, todas juntas, lo vencimos. La primera vez fue un desastre, casi logra vencernos. La segunda vez aprendió de sus tropiezos, supo que no debía subestimarnos y usó muchas artimañas para hacernos sufrir y darnos por vencidas. No es necesario decirles lo que les costó a muchas familias. -Twilight, pensativa, hay una mirada triste en sus ojos. No hablará realmente como lo venció, a ella tampoco no le gusta tocar el tema-. Una lección que jamás deben olvidar: Habrá muchos ponis que se crucen en su vida y jamás vuelvan a verlos, pero los buenos amigos siempre vuelven a cruzarse en nuestro camino, más de una vez. Si recuerdan eso, Discord jamás podrá ganar. Discord no es cualquier villano, es un ente antiguo muy diferente a todos nosotros y por lo tanto no puede destruirse. ¿Alguien sabe por qué?

Twilight hace una pregunta importante, Purplethink es el primero en levantar la mano. Twilight aunque esté molesto con él, le concede la oportunidad.

-Eh... porque simplemente no se puede. -Segundos de silencio, se da cuenta de que debe complementar su respuesta. Toma un poco de aire-. Es un espíritu, toma forma física y eso es lo que es lo que se convirtió en piedra, pero la estatua que está ahí solo es una parte de lo que es Discord, el caos está presente en todo el mundo y es necesario para que el resto de las fuerzas logren moverse e integrarse en armonía con este mundo. A veces, el caos se acumula y cuando no se le da el trato apropiado es probable que Discord surja.

-¡Exacto!... Me impresionas. -Twilight sonríe modestamente.

-Pobre diablo. -De la amiga de la unicornio rosa, la unicornio azul claro esta vez lanza su ataque verbal otra vez al pony terrestre. Twilight no se percata del insulto.

-Discord es más que un espíritu, es un ente que si no es controlado puede crear tanto caos que nos podría acabar a todos. Purplethink tiene razón, si no controlamos las fuerzas del caos y la armonía entonces Discord puede volver, por eso es muy importante los elementos de la armonía. Mientras la armonía exista, Discord jamás podrá ganar y mientras los elementos de la armonía existan Discord jamás podrá salir de su prisión de piedra. El cometió actos horribles cuando reinaba en Ecuestria. Fingió ser un aliado de Celestia y Luna, utilizó su confianza para llega al poder y cuando llegó mostró su verdadero ser. Pronto se hizo tan poderoso que nadie podía detenerlo. Celestia y Luna se atrevieron a enfrentarlo y en muchas ocasiones fueron derrotadas. Gracias a los elementos de la armonía, Discord pudo ser neutralizado.

-¿Quién creo realmente los elementos de la armonía?

-Interesante pregunta. Pero antes una pequeña prueba que les deseo hacer.

Una prueba, toma a los ponis por sorpresa. Purplethink se llena de nerviosismo, Longhorn al parecer se alegra con la noticia. Mirándose entre ellos algo torpes y desconcertados, ignoran que clase de prueba será. Twilight sonríe confiadamente, espera una respuesta positiva de los estudiantes. -¿Ven el laberinto detrás de ustedes?

Giran la cabeza. En efecto, un laberinto de paredes de arbustos espesos está detrás de ellos. Altas paredes, un gran territorio de muros que conforman el extenso laberinto. Un laberinto era señal de complejidad y de resistencia mental, a pesar de que todos eran estudiantes con excelentes promedios una prueba así podría ser traicionera.

-Discord me atacó a mí y a mis amigas en el laberinto. Era uno de sus juegos perversos para destruir nuestra amistad. La principal diferencia es que aquí no habrá peligro alguno. -Twilight ilumina su cuerno de un translucido color rosa, sorpresivamente las alas de los pegasos y los cuernos de los unicornios desaparecen. La acción se convierte en muchos gritos de protesta y horror-. No se preocupen, volverán a su lugar cuando se haya terminado la prueba.

Longhorn se asusta por la pérdida de su elemento distintivo, grita como niña mientras agita con mucha fuerza a Purplethink quien termina con nauseas después de la convulsión a sus huesos. Purplethink es el único que no pierde nada, no le dice a nadie pero posee una ventaja especial desconocida para el resto.

-Muy bien, esta prueba o juego como quieran llamarle es para probar sus habilidades de orientación espacial, memoria, perseverancia y trabajo en equipo. Cada pareja entrará al mismo tiempo al laberinto y tratará de llegar a la única salida que hay, juntos, no se permite que un solo poni llegue a la meta sin su acompañante. La pareja que logre cruzar todo el laberinto sin trampa ganará un sorprendente premio. No es obligatorio participar, no habrá consecuencias por ello, pero no tendrán la oportunidad de ganarse el premio, y créanme que este premio fue autorizado por la princesa Celestia y la princesa Luna, es algo extraordinario. La primera pareja que llegué primero será acreedora del premio especial.

Varios son los no gustosos por la idea de la prueba, aunque la idea del premio que según Twilight era de lo más genial modificaba su voluntad. Al final, todas las parejas aceptan el reto. Colocan sus cascos llenos de energía en la entrada del laberinto. Purplethink junto con Longhorn se encuentran en los primeros puestos.

-Recuerden: nada de trampa, la respuesta a su éxito es el trabajo en equipo. -Twilight, con una actitud decidida, vistiendo su hermoso vestido rosa con purpura-. 3... 2... 1... ¡GALOPEN!

Corren al mismo tiempo, hay empujones y competencia por quien galopa más rápido. Purplethink logra correr más deprisa que el resto de sus compañeros, lástima que al final eso no le sirve de nada porque Longhorn se queda rezagado por un buen tramo de camino y su excusa para hacerlo era que debía calentar primero. Twilight, a pesar de ver con buenos ojos a todas las parejas, está en especial consideraba que no tenía oportunidad alguna de ganar.

Para colmo de Purplethink, las dos unicornios que lo han insultado desde que llegaron volvieron a cometer sus fechorías una vez más. Esta vez la molesta potra de color azul le dice -Diviértanse perdiendo-. Su risa prepotente caía como taladros a los oídos de Purplethink

-Me dan lástima esos potros estúpidos que Celestia escoge solo por caridad. -Insulto de la yegua rosa.

Como quisiera verlas sufrir, le parece insoportable ser el hazmerreír de los unicornios. Desea pagarles con la misma moneda, pero se metería en más problemas de los que ya carga en el lomo. Por ahora solo queda tragarse el orgullo y esperar a su pésimo compañero. Minutos perdidos después, Longhorn llega hasta donde está el poni morado.

-Aunque me veas bien alimentado, soy un atleta... y no te burles. -Con tono cómico hacia el mismo mas no logra respuesta positiva en Purplethink.

Un caminante silencioso y con una cara de molestia en el interior del laberinto, mientras el otro intenta de varias formas volver a agradarle por medio de la risa. La metida de pata de Longhorn era más seria de lo que parecía, no tenía idea de lo que Twilight significaba para Purplethink. Como te sentirías si alguien a quien admiras te dice que está decepcionado de ti, eso no era algo que escuchabas todos los días.

-Mira... disculpa otra vez, pero realmente necesitaba esas fotos.

Purplethink ni siquiera lo mira, el intenta ignorarlo, sus pensamientos están en pasar la prueba y llegar en primer lugar. Actuaba como si estuviera solo, si tiene la compañía del unicornio era porque las reglas así lo demandaban.

-¿Ves mi atuendo? -Longhorn con su pezuña delantera alza su capa vieja y anticuada-. Claro que todos los vieron. De los estudiantes seleccionados yo soy el que lleva las peores prendas. Digamos que... mi familia tuvo un mal año, las cosas no salieron como queríamos, y con la apuesta de las fotos conseguiría algo de dinero... No me quejo, tengo una familia maravillosa y es mi deseo ayudarla, pero solo quiero que entiendas, necesitaba el dinero, para mí y para mi familia. -Longhorn lo dice en serio, su sinceridad cae en el clavo, logra que Purplethink logre hablarle una vez más.

-¿Sabes quién es Twilight Sparkle?... Es la estudiante número 1 de la princesa Celestia, es una de las ponis más importantes de los últimos 20 años. Conocerla era una oportunidad única. Pero gracias a ti, ahora me ve como alguien despreciable. No te atrevas a disculparte con esa escusa tan burda. Hay mejores ideas para conseguir plata.

-¡Es la verdad! ¡Yo no miento! Claro... cuando quieres conseguir dinero no lo haces estando aburrido o triste, si tienes la oportunidad lo haces con dicha y risa.

-Tonterías...

-Y si realmente no querías problemas, ¿Por qué no te fuiste? -Pregunta no grata para Purplethink. Aunque no quiera admitirlo, este unicornio le agrada por alguna razón que no entiende. Aunque su orgullo por el momento puede más, se concede el lujo de no perdonarlo tan fácil.

-Mejor cállate, que no me dejas concentrarme.

-Ok... pero creo que ya nos perdimos.

En efecto, su discusión los desconcentra el tiempo suficiente para llevarlos a su perdición. Caminos de pasto y piedra liza, paredes de arbusto frondoso tan altas como árboles, era lo único que veían a su alrededor. Solos, sin una pista de su ubicación. Purplethink desesperado, corre en direcciones arbitrarias solo para llegar a un parque de flores y fuentes de roca. Un unicornio sin cuerno y un poni sin idea, un vergonzoso problema. Longhorn decide tomar las riendas y un conflicto de autoridad estalla. Longhorn optaba por un camino y Purplethink por otro: intuición vs desesperación.

-Ok, tomaré tu estúpido camino. Si por alguna razón somos los últimos en salir, será tu culpa absoluta. -Dice Purplethink mientras se va por la opción de Longhorn, su antipatía por fin saca de quicio al unicornio.

-¿Sabes qué? Mejor tomamos tu camino, para que la nena no llore. -Longhorn entonces se dirige por el camino opuesto de su compañero (irónicamente)

-Y me dices nena a mi... claro. El príncipe de la comprensión y el buen juicio. -Purplethink siendo sarcástico.

-Eres tan difícil de complacer, para la próxima escojo como mejor amigo a una rocAAAAAAHHHHH! -Longhorn, mirando solamente a Purplethink para completar sus insultos, si hubiera puesto los ojos en el camino habría visto una larga escalera. Nadie sabía que el laberinto tenía escaleras.

Hay muchas reacciones internas provocadas por la oración y el grito de su mal compañero, la primera reacción provino de las palabras "mejor amigo". Le provocó un sentimiento extraño (hace mucho tiempo que nadie le decía amigo). La segunda reacción fue de sorpresa y espanto, pudo escuchar el cuerpo del unicornio caer y chocar con duras y filosas escaleras de roca maciza (20 escalones para ser exactos).

Longhorn queda en el piso, inmóvil y con heridas en su pelaje blanco.

Un accidente posiblemente grave y no hay nadie cerca el cual pueda ayudarlos. Purplethink se acerca temeroso al cuerpo inmóvil de Longhorn, camina en círculos sin saber qué hacer, sabe de primeros auxilios pero jamás los ha usado en la vida real. Trata de calmarse, sabe que no logrará nada entrar en pánico. "¿Qué diantres hace una escalera en el laberinto? Bueno, esa pregunta es estúpida, no hay ninguna regla que me índice que no es permitido tener escaleras en laberintos...Escaleras... escaleras..." pensaba Purplethink mientras un montón de recuerdos inundaban su cabeza. Por alguna razón, no podía quitarse de encima la idea de las escaleras.

-Aún estoy vivo, no te robes mis herraduras. -Longhorn abre los ojos, después de su oración nada jocosa empieza a dolerse de los golpes. Purplethink aunque no lo acepte, siente alivio y alegría ver a su compañero consciente. Longhorn no puede levantarse, su pata trasera está mal herida, también su lomo está muy golpeado-. Huy... disculpa poni terrestre por causarte tantos problemas. Supongo que perderemos ahora, y yo ya empecé perdiendo mi salud. Yo quería que ganaras el premio.

Longhorn entre más lucha por levantarse más se lastima, apenas logra ponerse de pie. Sus heridas le impiden caminar. Purplethink con una gentileza inusual (hacia un unicornio) le ayuda a mantener el equilibrio, está preocupado por su compañero y por ganar.

-Se ve que te intereso después de todo. -Dice Longhorn con una carcajada entrecortada.

-Cállate o te dejo aquí. -Purplethink pensando aún en la escalera, hay algo que no lo deja en paz respecto a este laberinto y a su escalera-. Una escalera...

-Sí, son muy bonitas y hay de muchos colores. Todo por hacerte caso.

-No es mi culpa, yo tampoco esperaba esto.

Purplethink encuentra algo familiar en esas escaleras, no tarda mucho en encontrarlo. Hace mucho tiempo cuando era un pequeño potrillo, su maestra le habló de este laberinto, uno de los más grandes de toda Ecuestria; ella en vacaciones lo había visitado y hablaba maravillas del palacio (solo has áreas permitidas para los turistas) y del laberinto.

Purplethink, interesado por el tema se puso a investigar y entonces se fascinó por los laberintos durante un largo tiempo, en las bibliotecas incluso leyó sobre ellos. Curiosamente en un libro estaba el mapa de este laberinto y sus respectivas formas para llegar a la única salida. Recuerda especialmente los "puntos de referencia", señales dentro del laberinto para no perderse, uno de ellas eran unas largas escaleras.

Purplethink, hace más esfuerzo por recordar el texto y las imágenes que hace más de 8 años leyó. Lo hubiera recordado antes si no es porque estaba ocupado molestándose con Longhorn. Tantos problemas que se hubieran ahorrado.

En sus recuerdos está la respuesta a su victoria.

-¡Ya lo tengo! -Dice con euforia, se llena de energía y optimismo porque aún tiene la oportunidad de ganar.

-¿Entonces si me vas a abandonar? Al menos dame agua y tu cámara para grabar mi soledad.

-Se cómo podemos salir de aquí, aún podemos ganar.

-¿Disculpa?

-Lo leí hace casi 10 o 9 años, un libro de la biblioteca de Manehattan. La escalera es un punto de referencia, significa que estamos en un extremo del laberinto. Entonces... -Purplethink camina en círculos más rápido de lo normal, eso lo hace cuando piensa profundamente. Su voz se hace más apasionada de lo normal-. Usando el algoritmo matemático de los caminos más cortos... -Purplethink era más inteligente de lo que parecía, poseedor de habilidades increíbles y una de ellas era su extraordinaria memoria-. ¡Ya se el camino de salida!

-Creo que tenemos un problema, no es por fastidiarte otra vez pero ya sabes las reglas. Si quieres desquitarte, puedes romperme la otra pata, solo te pido la oportunidad de desmayarme.

-Voy a cargarte.

Deja sorprendido a Longhorn, incluso se reprime la risa. El cuerpo delgado de Purplethink contra su cuerpo superior en masa muscular. Purplethink toma aire y voluntad, se coloca debajo de la panza del unicornio y en un esfuerzo extra logra levantarlo en su lomo. Longhorn queda algo impactado por la fuerza de Purplethink, espera que no se canse a la mitad del camino o que lo tire por accidente.

Purplethink, tomando grandes bocanadas de aire, esperando resistir hasta el final. Cierra los ojos para pensar en su ilusión, su objetivo principal, la razón de toda su inspiración, el motivo principal de este viaje: la princesa Luna. Sabe que aún tiene oportunidad de conocerla y presiente que el premio por ganar esta competencia lo acercará más a ella.

-Un poni montado sobre otro poni. Si alguien me dijera eso, diría que es una pareja homosexual.

-¡Cállate y déjame pensar!

Dentro de su máquina cerebral, lucha por encontrar el camino más corto a la salida. Solo espera no equivocarse, lo que está por hacer es equiparable a un salto de fe. Emprende el reto decidido, camina a paso largo y constante. Como si conociera el camino, dobla esquinas y elige pasadizos, ignorando de forma bastante peligrosa los demás.

-Esto es mejor que un taxi. Realmente me asustas, pareces un loco.

-Estoy salvando tu plot y el mío. Cállate solo unos momentos y déjame pensar.

Purplethink solo se detiene para tomar algo de aire, no se toma ni siquiera el momento de cerciorarse si la ruta que toma es la correcta. Sabe que ya perdieron mucho tiempo, cualquiera podría estar a punto de llegar a la salida. En su alocado camino se topa con las otras parejas, la mayoría los observan y los catalogan como auténticos locos, algunos extrañados y otros simplemente los ignoran. Excepto una pareja de pegasos que deciden seguirlos.

Por poco chocan con las dos unicornios creídas, igual recibieron insultos degradantes, a Purplethink no le importó, él estaba demasiado concentrado en sus cálculos mentales que ignoraba todo a su alrededor. Longhorn dudando sobre la salud mental de su compañero, ambos esperan no perder de la peor manera. Purplethink no es tan fuerte, aun así no se rinde y continúa caminando lo más rápido que puede, el dolor en sus músculos y espalda se hacen más punzantes cada segundo, no falta mucho para que su cuerpo se derrumbe.

Purplethink ya no puede más, el peso de su compañero es más de lo que puede soportar, aun así no se da por vencido. El trayecto final: 20 metros de camino recto hasta la única salida, Purplethink y Longhorn por primera vez reaccionan como si fueran un equipo. Por fin, están a tan solo metros de llegar a la meta, Longhorn sabe que serán los primeros en llegar, contó a todas las parejas que se toparon en el camino, nadie se había acercado ni siquiera a la mitad del trayecto.

Lentos pero seguros, Twilight está en la salida sorprendida por la única pareja que está a punto de salir de su interesante prueba. Pero entonces ocurre un problema, dos pegasos (sin alas) aparecen en escena, dispuestos ellos a conseguir el preciado premio, corren a toda prisa. Sin que Purplethink ni Longhorn se dieran cuenta, esos dos pegasos los siguieron por un buen trayecto, ahora que están a tan solo un pasaje recto de ganar deciden aprovechar la ventaja.

Purplethink no puede más, camina lo más rápido que puede, escucha los cascos de sus adversarios acercarse a toda velocidad, escucha la voz de su compañero implorando que lo deje caer y que concluya el camino porque el enemigo se acerca demasiado rápido. Purplethink deja de escuchar, se desconecta del mundo, sus músculos se duermen y sus ojos se cierran. Lo último que recuerda es dar el último salto de esfuerzo a tan solo centímetros de la meta. Ya no le interesa ganar, solo deja que las cosas pasen como el destino dicte, cae en el pasto y queda inconsciente por unos cuantos segundos.

Abre los ojos, con el cuerpo adolorido y algo mareado. No siente el cuerpo de su compañero sobre él y eso es un alivio. Ve unos cascos de herraduras doradas y unas piernas de blanco pelaje. Casi se muere del terror al darse cuenta de quién es.

Así es, la Princesa Celestia está en frente de él, con un rostro serio que lo mira solo a él. La princesa no pronuncia ninguna palabra, espera el momento adecuado para dar un mensaje que solo será para Longhorn y Purplethink.