Fenrir: un paseo por la playa

Story by kodiac96 on SoFurry

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#2 of Fenrir


Esta amaneciendo, al parecer David se está despertando, lo sé muy bien, pues solo el se levantaría bostezando (lógico si solo somos dos ahí) he estado toda la noche guardándole una sorpresa, espero que le guste mucho. Al escuchar que se ha levantado, me dirijo al sofá ocultando algo detrás de mí. El me mira lo entusiasmado que estoy, e inmediatamente sabe a que me estoy refiriendo, si así es, es nuestro aniversario, 5 años exactos de habernos conocidos, y estar juntos.

-muy buenos días amor, como sigue tu pierna.

-como va a seguir. Jodida.

-oye no tienes por qué ser tan grosero.

-sabes que siempre contesto así.

-jejeje, es cierto-dije mientras movía un pie lado a lado- oye te tengo una sorpresa.

-ah sí, pues venga que me tenéis muy entusiasmado.

-bueno, ¡feliz aniversario!

David coloco una gran sonrisa, casi querría tirarse en mi para darme un fuerte beso, claro eso lo hubiera hecho si no hubiera sido por lo de la pierna. Mi regalo era simple, pero lo daba con todo mi corazón, era un retrato de nosotros dos juntos, viviendo en un lugar feliz. Se lo di en las manos, mientras el apreciaba el retrato le di como segundo regalo, el beso más tierno que pude dar. Aunque todo estaba bien. David se veía algo apenado

-eh, Héctor, gracias mucho por este regalo, eh, veras no es que se me haya olvidado...

-no te preocupes yo entiendo, además ya me has dado mucho trayendo comida y cuidarme.

-sí, pero es común que ambos se regalen para demostrar lo mucho que se aman.

-Ya David, que entiendo, además con solo ver tu sonrisa y tu linda carita al verme, se lo mucho

que me amas.

-pues si a quien más voy a amar si sos el único.

-que grosero.

-vale, que es una broma.

-mala, por cierto.

Ambos estábamos compartiendo un lindo tiempo en el cuarto juntos, pero realmente me ha aburrido estar encerrado en el mismo lugar por durante casi 5 años, asi que he pensado en arriesgarme, bueno mejor dicho arriesgarnos a salir y poder hacer un picnic fuere de ese cuarto.

-sabes que deberíamos hacer.

-¿Qué?

-salir, hacer un picnic y poder disfrutar de un hermoso paisaje.

-¡estás loco! si salimos nos podrían matar.

-en la playa no.

-de que hablas.

-vamos tu sabes que la guerra está en la ciudad no en la playa.

-pero como piensas llegar hasta allá.

-vamos, si no esta tan lejos, además no nos iríamos por la superficie, sino por los túneles, así luego llegaremos a los desagües y luego a las playas.

  • bueno si tanto insistes.

Tome a David cargándolo entre mis brazos, no pesaba mucho, de hecho ambos estamos algo delgados, pero en forma. En fin lo llevaba cargado, salimos del cuarto y con mucha precaución mire a todos los lados, para asegurarme a que no hubiera nadie que nos pudiera disparar. Daba pasos cortos pero seguros. Estoy frente a la calle, de seguro en el otro lado está la entrada al desagüe.

Estaba a punto de correr, cuando de repente, David tomo mi rostro diciéndome.

-Héctor, mi amor. Prométeme que bajo cualquier circunstancia te salves a ti primero antes que a mí.

No querría responder que si, pues eso sería lo último que hiciera, pero David siempre a querido protegerme, desde que lo he conocido, siempre ha estado cuidándome de cualquier cosa que me pase.

Flashback

-hola, cómo te llamas.

-mi nombre es Héctor.

-Héctor, me gusta...ah mi nombre es David.

-mucho gusto.

-y porque te metiste a la escuela militar.

-bueno, mi padre fue militar, y es una persona muy patriota, y como honor de la familia yo también debo serlo.

-jeje, que gracioso, yo estoy aquí por algo parecido.

Desde esa vez que me ha sonreído nunca olvidare su dulce carita, podría decirse que me enamora a primera vista. Su pelaje suave, y su forma de hablar, con esa voz que me hace sonrojar cada vez que lo escucho.

Mi primera noche, esperaba tener un compañero de esos que te molestan a cada rato, pero para mí muy buena suerte, me había tocado con la persona que mas querría estar junto. Asi es con el dulce y tierno Husky.

-vaya, vaya, vaya... miren nada mas a quien tenemos aquí.

-jejeje. Hola David no esperaba encontrarte aquí.

-bueno, pues no estés tan contento, crees que podrás soportarme.

-creo que si.

Esa noche pasamos hablando mucho de nuestras familias, de nuestros gustos, aunque nunca especificamos nuestros gustos sexuales. Claro si es una persona que conoces por primera vez no te le tiraras de una sola vez. Podría decirse que esa noche fue como una cita, pero no era así, pues una cita en la escuela militar no es muy romántico que se diga. Pero obviando todo eso, fue una noche muy especial.

Aun recuerdo como me ayudaba cada vez que tenía que ordenar la cama. Siempre que lo hacía fallaba en algo, pero el rápidamente lo ordenaba, así no me regañarían.

Realmente no era muy bueno con las armas, bueno mejor dicho no estaba listo para el ejercito, era un inútil al estar ahí, pero decidí seguir adelante, solo para estar junto a él. Cada vez que teníamos que usar un arma, el se colocaba detrás mío para darme indicaciones, incluso, había veces en donde el tomaba mis manos para poder apuntar bien, claro lo hacía sin que nadie se diera cuenta.

Todo pasaba de maravilla hasta que...

-Héctor despierta.

-¡ah! ¿Qué?... que paso David.

-te has quedado dormido o que, tenemos que cruzar la calle.

-ah si, jeje, es que estaba un poco distraído.

-bueno pues es mejor que no te distraigas mientras cruzas, sino nos mataran a ambos.

Vaya si que soy tonto, ponerme a recordar en un momento así, pero bueno es mejor que empiece a corre. Sin seguir pensando en el o en cómo nos conocimos. Tome impulso para poder ir lo más rápido que podía, corrí, empecé a correr, cruzando la calle, no sé si será el sonido del viento pero parecía que fueran sonidos de balas, aun así ninguna bala o lo que haya sido, me toco ni toco a David.

-hu... que salvada, hey desde cuando eres tan rápido.

-no lo sé-dije algo cansado-creo que al verte a ti me da fuerzas como para ir más rápido.

-bueno, pues si verme te hace ir más rápido, ya me imagino cómo te hará si te doy un beso.

David, estaba a punto de darme un beso, me lo hubiera dado, si no hubiera sido por que alguien se acercaba. No pensamos en quedarnos para poder ver quién era, llevando aun a David en mis brazos, corrí hacia las tuberías, para ir a la playa.

Pase muy cuidadoso en las tuberías, pues a medida nos acercábamos, el espacio se hacía más pequeño, y ya saben, debo tener cuidado por la pierna de mi lindo husky. El solo cuidaba toda la comida que llevábamos en sus manos, para que no se ensuciara con cualquier cosa sucia que había.

Por fin llegamos, el lugar era hermoso, se podia sentir la brisa tocar nuestro pelaje, un hermosos paisaje que rodeaba todo el lugar, por primera vez se puede ver el sol con claridad, las olas chocaban con la arena y piedras. David insistía en que lo bajara, yo lo consideraba muy arriesgado bajarlo, pero realmente él es muy fuerte al igual que su voluntad.

David se dirigía al agua saltando en un pie, creo que ya sé que lo que intenta hacer. Meter la herida en agua salada para que cicatrice más rápido. Mientras él hacia eso, yo empezaba a preparar el lugar para poder comer y disfrutar de una paz que no hemos podido sentir durante 5 años.

David ya volvía, con su pierna mojada. Lo ayude a que se recostara, mientras yo saque la comida, ambos comimos mucho sin importar cuanta comida quedara para el mes, pues esto solo pasaría una vez. Davis estaba muy feliz, al igual que yo.

Mientras hablábamos, compartíamos la comida boca a boca, como lo hace una madre con sus polluelos, yo seguía recordando cómo nos conocimos, como llegamos a ser novios.

Todo pasaba de maravilla hasta que una noticia alarmo a todo el cuartel, todos estaban confundidos nadie sabía quién era el enemigo, la noche en que nos informaron de eso, David y yo nos aterramos, nos habían informado que nuestras familias han sido evacuadas, que toda la ciudad esta vacía. Nosotros pensábamos que moriríamos, pues teniendo tan solo 16 años, éramos muy cobarde, en especial yo. Pensamos que no pasaríamos de esa noche, así que, en esa noche hicimos por primera vez el amor.

No nos importaba quien nos viera, pues si esa vez sería la última vez que nos viéramos, era de aprovechar la ocasión. Recuerdo como pasábamos momentos tan placenteros, como se podía escuchar la guerra comenzar, y como se escucha en el pasillo miles de soldados trotando para llegar a pelear. Mientras nosotros disfrutábamos de nuestra privacidad, claro que tarde o temprano acabaría, ya sea porque nos agotamos, o porque alguien no vaya a ver.

En cuanto estábamos a punto de terminar, David se bajo de la cama, se vistió rápido, mientras yo hacía lo mismo. Tan pronto como estábamos vestidos, el tomo mi mano, huyendo del lugar. Pasábamos por miles de bombas, vaya lo de la guerra no era mentira, era increíble, en mi mente pasaba la imagen de cómo el y yo huíamos de aquel lugar, pasando entre balas y bombas, poniendo en práctica lo que nos han enseñado, al tiempo llegamos a una casa, asi es la casa de David, no metimos en un refugio que construyo su papa, y ahí nos escondimos, se que eramos demasiados jóvenes como para soportar una guerra, pero en cuanto paso el tiempo ambos nos fuimos haciendo más fuerte, hasta la fecha de ahora.

-Amor ¿qué te ocurre?

-ah, ¿Qué?-dije mientras despertaba de mi sueño- no nada es solo que estaba recordando...

-como nos conocimos.

-¿Cómo lo sabes?

-vamos hemos estado por más de cinco años juntos, como no he de conocerte.

-jeje, tienes razón.

Ambos seguimos compartiendo de una linda cita, con un paisaje muy hermoso, solo yo y el, en medio de tanta paz. Era una bella situación que nunca olvidare. Seguíamos riendo de todo lo que habíamos vivido y hubiéramos seguido de no habernos asustado al escuchar un ruido muy extraño que se acercaba.

-no. No puede ser-dijo David asustado-

-¿Qué ocurre?

-escóndete ¡vamos escóndete!

Tratamos de escondernos, pero era inútil, pues no había mucho lugar donde ocultarse, y aparte que no podía dejar a mi querido husky tirado. No me escondí, más bien me he quedado junto a la persona que amo, mientras un escuadrón de militares se nos acercó. Eran enemigos, lo sé, pues he pasado en el ejército como para conocer los aliados. Solo espero que no nos hagan daño.