Fenrir: buena compañia

Story by kodiac96 on SoFurry

, , , , , , ,

#1 of Fenrir


Otra vez el sonido de las bombas cayendo, a este punto me sorprende que no nos hayamos enloquecido. Las voces de inocentes llorando y pidiendo auxilio, mientras yo y mi amado David solo nos encerramos en el refugio para poder sobrevivir otro dia mas. Pues verán el mundo se ha vuelto un caos afuera, no quisiera decir que esta es la tercera guerra mundial, pero si es el fin.

Mi nombre es Héctor, soy un Collie de 20 años. Y David es un lindo Husky de mi misma edad, ambos nos conocimos en el ejercito hace unos 5 años, podría decir que fue mi primer amor, y hasta la fecha mi único amor, compartimos tanto en común. Pero el punto es que David y yo tuvimos que huir del campo militar, pues nos aviamos enterrado que una guerra se aproximaba, y que de alguna manera iríamos a participar todos sin excepción por la edad que tuviéramos. Éramos jóvenes, y era lógico que temiéramos, además tenemos vida por delante.

Aun lo recuerdo, como David tomo mi mano, mientras las bombas caían por toda la ciudad. Hasta la fecha no sé quien pelea con quien. Pero todos están en contra de todos. David me llevo a la casa de sus padres. Al parecer ellos ya habían huido o en lo peor de los casos ya habían muerto.

La guerra fue muy repentina, en tan solo segundos, ya se escuchaban bombas, disparos y tanques. Nos refugiamos en una bodega que se encontraba debajo de la casa. Era un poco estrecho pero que más da. No se si sus padres tenían una idea de que una guerra se acercaba, porque en ese cuarto se encontraba todo lo necesario para alimentarse, o sobrevivir por un largo tiempo.

Es una locura hemos pasado 5 años en es cuarto, saliendo cuando ya no habían provisiones. Era una guerra sin fin, nunca acaban los muertos. Tratábamos de contactarnos con el exterior, pero en todo el mundo no había una noticia acerca de la guerra. Bueno realmente no había nadie que anunciara lo que estaba pasando.

Ahorra yo y David hemos pasado juntos durante 5 años, no lo negare, ambos pasamos ratos muy íntimos, algo que me da placer con solo recordarlo. Por el momento estoy encerrado en el cuarto viendo películas viejas para poder olvidar un poco toda la guerra. Aunque estoy preocupado, David no ha vuelto, me dijo que traería mas comida para un mes. Estoy muy preocupado por el, hasta que alguien empezó a abrir la puerta.

-¡David!-grite angustiado, mientras lo abrazaba- me alegro que este bien.

-Te dije que es imposible que alguien me atrape.

Sin dejar de abrazarlo, le di un apasionable beso, mientras el dejo caer toda la comida al suelo, solo para tomar mi rostro y luego ir bajando poco a poco hasta llegar a mi cintura, sus suaves manos hacían que mi cola se moviera sin control. Por un momento dejo de besarme, me miro a los ojos con esa linda mirada, a lo que yo acosté mi cabeza sobre su pecho.

-no te preocupes-me dijo David- todo saldrá bien.

-¿crees que podremos salir de aquí?

-no lo dudes. Ya casi termino de reparar la camioneta para poder huir de esta ciudad.

-bueno, por lo menos no estoy aburrido viendo las mismas películas una y otra vez.

-eso es sarcasmo.

-no mi corazón-dije mientras los volví a besar-

David volvió a tomarme, pero esta vez terminaría lo que había comenzado. Bajo sus manos más, hasta llegar a agarrarme mi trasero, con delicadeza, empezó a acariciarme. Sentí una emoción que al parecer nunca terminaría, mi cola no dejaba de moverse, yo pensé en seguirle el juego, asi que hice lo mismo con él.

Baje mis manos hasta su lindo trasero, al igual que yo él no paraba de mover la cola. Ambos estábamos conectados como si tuviéramos las mismas emociones. Luego él empezó a cambiar las manos de posición, con lentitud las coloco en mi miembro. Esa emoción que había sentido antes ahorra se volvía mas fuerte, solté las manos de su trasero, para dejar que el hiciera todo el trabajo.

Lentamente David empezó a masturbarme, provocando que mi miembro se colocara erecto. Sin soltar la mano, bajo hasta mi cintura, para poder lamer mi miembro, yo no dejaba de sentir esa emoción. Pronto el empezó a meterla en su boca, a cada mamada que le daba con su calida boca, yo daba un suave suspiro.

Durante una larga sesión de lamida, yo solo cerraba mis ojos para poder disfrutar cada momento que el metía su boca en mi miembro, en esos momentos uno llega a olvidar todo, incluso algo tan terrible como la guerra.

Luego de un momento deje salir un chorro de semen, que salpico en la cara de David, el se levanto para colocarse cara a cara conmigo, yo seguía con los ojos cerrados sin percatarme que él me miraba muy serio. Hasta que medio los abrí y entendí que me estaba insinuando.

-jejeje. Disculpa no sentí que venía. Eh ¿quieres que te limpie?

-sería lo más correcto.

Me acerque a su cara y con mis manos tome su rostro para luego empezar a tragar todo el semen que había derramado sobre él. Luego de haber limpiado su cara, me acerque a su hocico para darle otro beso y así compartir mi semen.

Luego de unos minutos ambos nos colocamos en el sofá que se encontraba ahí, yo estaba aun despierto, pero David se durmió, no lo culpo debe ser algo cansado, buscar alimento todo el día, y aparte estar reparando la camioneta. Por supuesto que yo tampoco me quedo con brazos cruzados. Por lo menos preparo la comida y entreno para proteger en caso que alguien se le ocurra llegar a atacarnos.

Paso la noche viendo como duerme, hasta que me empiece a dormir, para mi verlo a él es como contar ovejas. Luego caigo dormido junto con el, esperando a que mañana podremos despertar vivos.

-cariño, despierta.

-¿Qué?...que pasa

-no te asustes, mira creo que ya casi termino de repara la camioneta, solo tengo que traer una pieza.

-¿quieres que te acompañe?

-no...no te preocupes yo podre solo.

-esta bien.

David tomo un maletín pequeño, se acerco para darme un beso de despedida, mientras yo lo tome de los brazos deseando a que no se fuera. Pero que puedo hacer, el es muy independiente, y no quiere que yo muera. Podría decirse que es muy sobre protector conmigo.

Me pongo en el sofá y empiezo a ver la película "el gran dictador" de Charles Chaplin. Es una película vieja, pero muy chistosa, aunque hable de guerra, hacer verla de una manera cómica y hasta me da ánimos de tomar mi rifle e ir a matar los que están provocando esto. Pero luego me doy cuenta que no podría hacerlo solo.

Está terminando la película, cuando de repente el sonido de otra bomba se escucha, no sé exactamente donde, pero estoy seguro que ha caído muy cerca. Me levanto del sofá, preocupado a que pude estar cerca David y le caiga una bomba. Pero no puedo salir, sabiendo que hay alguien atacando afuera, es mejor que me queda ahí. No es cobardía, pero tampoco quisiera que saliera y me diera cuenta que no está David, y me disparen. Y que luego venga el viendo como muero. Es algo triste, y no quisiera que pasara.

Estoy aburrido, esperando a que David venga de nuevo, miro mis pies, mis manos. Siempre he tenido como hobbie el dibujar, así que me puse en la mesa a retratar el hermoso cuerpo de David. Siempre que dibujaba la parte de la cintura, me daba la misma emoción que se sentía al ver su cuerpo desnudo.

Siempre me ha gustado fantasear teniendo una relación con el, me imagino que esta encima de mi, besándome, y metiendo su verga en mi trasero, mientras imagino, con mis manos empiezo a acariciar mis testículos, y luego tomo mi miembro para empezar a masturbarme, hasta que empiezo a tirar semen por todo mi cuerpo.

Esto lo hago muy a menudo, pues es aburrido estar solo.

Ya han pasado muchas horas, estoy seguro que David está muy cerca, lo se, lo siente con mi nariz. Y al parecer no me he equivocado, ahí viene David, con un aparato y... oh no.

-¡David! ¿Qué te ocurrió?

No podía creer lo que miraba, venia herido, tenía una pierna herida y sangrando. Lo coloque en el sofá, limpie toda la sangre que tenia. Mientras le preguntaba que le había pasado.

-no fue nada. Solo me callo una bala.

-aun debe estar dentro. Tendré que sacártela.

Tome unas pinzas, me limpies las manos y empecé con la operación. Me tarde unos minutos, limpiando, tratando de no dañar más su pierna. Me fue difícil pues no tenía muchas herramientas, hasta que al final, pude sacársela. Tape la herida, colocándole una venda.

-bien ya está. No te muevas mucho Ok

-que buenos que estas aquí, para ayudarme.

-ves cachorro, te dije que podría ayudarte. Ahorra guarda reposos, y no te camines mucho.

-gracias, cariño.

Esa noche no dormí viendo cómo reaccionaba. Ya saben cuando hay un herido hay que ser muy buen enfermero. Estoy preocupado, por el, que tal si la próxima vez no solo llega a ser una herida, que tal si lo matan. Esperen un momento, sé que puedo hacer. Si es una muy buena idea.