Epílogo: Una carta

Story by Mastertuki on SoFurry

, ,

#30 of El Secreto de Tora

Y aqui tenéis el epílogo, un pequeño extra. ¡Disfrutadlo!


Querido Bryce.

Estás furioso, decepcionado, e incluso un poco triste de que no te haya dirigido la palabra en todo este tiempo. Sé que esperabas que tras nuestros rencuentro volviera a hacer acto de presencia en el hospital y no me has visto, y que eso te ha apagado un poco. Y realmente, lo siento, lo siento mucho.

Pero he estado ahí. He ido cada día, he cruzado la puerta de cristal y he permanecido delante de tu puerta un par de veces. He visto a Tora incluso, que me ha insistido en que me estabas buscando, pero le pedí que por favor hiciera como si no me hubiera visto. Quería, por mis propios medios, dar el paso y volver a verte, pero he sido incapaz porque soy una cobarde, y no puedo mirarte a la cara.

Desde que has vuelto al hospital, has estado fortaleciéndote otra vez. No por ti, si no por tus amigos. A pesar de haber quedado seriamente dañado, y no poder recuperar nunca más la capacidad de correr, ni parte de la audición, sigues insistiendo por recuperar tu independencia lo máximo posible.

Tu padre era más o menos igual. Era un rebelde, un luchador nato. Tal vez no tan al extremo como tú, pero permanecía de pie echaran lo que echaran para poder seguir viviendo, porque sabía el milagro que disponía entre sus manos. A veces incluso trabajaba horas de más durante el día para que nos viéramos en secreto por la noche, en aquellas horas que se suponía que tendría que haber estado haciendo otras cosas. Era un cabezón, y como era, fue capaz de frenar a Pelz y matarse antes de matar a su propio hijo.

Perder a tu padre fue todo un duro golpe para ti, pero más lo fue que todo el clan se volcara en tu persona, creyendo que eras débil. Y lo fue para mí, que perdí a mi pareja, pero años más tarde, perdí también a mi hijo. No te fuiste solo, de hecho, si no gracias a mí, y mi continua colaboración con Senko, con el que tuve parte del contacto durante un tiempo, hasta que desapareciste para siempre.

Pero he estado ahí, buscándote, al igual que lo hacía Tora. De alguna forma u otra, todos tirábamos de algunos hilos para que tu novio encontrara el material adecuado con el que contactar contigo. Y exigí al líder del clan que te pusieran a Uros como guardaespaldas hasta que yo pudiera estar ahí presente.

Encontrarte, que me reconocieras, fue toda una sorpresa para mí. Sabía que ibas a reconocerme porque te oí hablar al salir de la sesión de la hipnosis, pero Uros y Anne me dieron fuerzas para hacerlo. Sin embargo, me he dado cuenta que llevo tantos años manipulando, trabajando desde las sombras, encubriéndome de mala manera, que de no haber sido así, tal vez Damaru y Laura estarían vivos. He sido una mujer tan cruel, que soy incapaz de mirar a la cara de mi hijo y pedir perdón como si nada...

Ambos necesitamos un tiempo para aclarar nuestras vidas.

Por ahora, Uros y yo nos hemos ido con Anne. ¡Te he cogido prestado a Mioko, no me lo tengas en cuenta! El pobre estaba tan solo en casa que se ha animado a irse de viaje conmigo, pero te lo devolveré, no te preocupes. Sé que le tienes mucho cariño, y yo me aseguro así de no tardar demasiado en dar la cara y que nos veamos de nuevo. Afrontaré por entonces toda la culpa que me tengas que echar, y todas las acusaciones que tengas que darme.

Claïr es una vieja amiga mía. Es más mayor que yo, y os echará una mano. Estará en todo momento en contacto con el clan, y sé que ahora que has recuperado la memoria, querrás hablar con alguien de los viejos tiempos y que el burro de tu pareja no será capaz de satisfacer esa necesidad, así que ¡Adelante! Claïr es dura de pelar, y como tiene que volver dentro de un tiempo, tengo otra obligación para regresar.

Sé que eres incapaz de estar quieto ni un solo segundo, y que a pesar de que Lizar te habrá dicho que dejes de ayudar a los demás, no le vas a hacer caso. Le comuniqué que te diera ese consejo, pero lo vas a ignorar, así que vive tu vida, cariño. Haz lo que mejor sabes hacer, y vive cada segundo como si fuera el último. Porque después de todo lo que has pasado, date cuenta que has vuelto a nacer, y que vuelves a tener una oportunidad, no solo para ayudar, si no para no cometer los mismos errores del pasado.

Yo volveré en un tiempo, no lo olvides.

Y te prometo, te juro, que entonces, será para siempre.

Gracias por todo... Te quiere...

Tu madre."