Capitulo 1. El tigre de arquitectura.

Story by renny2022silver on SoFurry

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#1 of como alguien te cambia la vida


Bueno esta es mi primera historia que publico aqui, no le voy a hacer ninguna advertencia, porque se que las ignoran siempre. solo quiero que ignoren mis herrores de ortografia, que espero que no sean muchos y que si hay herrores de contexto lo digan, estoy dispuesto a corregir herrores, por lo que ven este es el primero de una pequeña serie que pienzo hacer, gracias a la inspiracion de Alfred Sherford y su serie "el lobo guardian", me encantaria queen algun moemnto las historias se entrelazaran, pero pro ahora me conformo con mostrarle este capitulo, lo escribi en un dia, me que de impresionado yo mismo, tenia muchisima inspiracion.

les aviso que no tiene escenas sexuales ya que este primer capitulo no las requiere, pero para proximos si habra.

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Capitulo 1. El tigre de arquitectura.

Bueno, al fin de vuelta en casa, después de todo el día en la universidad estudiando para mi próximo parcial de mate. Hola soy Renny Silver, un Husky Siberiano de 18 años, con el manto negro con un ojo azul y el otro amarillo (uno de mis principales atractivos), de 1,90 de alto, cabello semi largo (hasta los hombros) liso y negro, soy delgado, pero algo fibroso, no mucho; estudio en la Universidad Simón Bolívar, estoy en la carrera de Ingeniería en Computación, a mediados del segundo trimestre. Soy un chico muy solicitado en la universidad, aunque decidí hacer una pausa en mas aventuras para profundizar en mis estudios, ya tuve suficiente con toda la secundaria, muchas chicas y chicos andaban detrás de mí y yo no perdía la oportunidad de tener una aventura, pero nunca nada serio. Ah... por cómo se habrán dado cuenta por lo que dije ante soy bisex, y no me arrepiento de serlo.

Continuando, el fin llego a casa, vivo en San Antonio de los Altos, algo alejado de mi universidad, pero estoy feliz porque estudio en donde y lo que quiero. Saco las llaves y abro la puesta de mi apartamento, me recibe mi madre, una husky de manto gris oscuro con los ojos azules, de unos 42 años:

  • Hola hijo, como estas? Como te fue en la simón?- saluda ella.

  • Hola mamá, bien, todo como siempre- le respondo algo cansado.

  • Que bien me alegro, comemos en media hora, vas a cenar.

  • No la verdad no, ya cene en la simón. Quiero es acostarme a dormir que mañana tengo que madrugar de nuevo.

  • Bueno hijo, entonces nada, buenos noches.

  • Igual a ti mamá.

Y así me meto a mi cuarto y me quito todo de encima, los dos celulares, el ipod, la cartera, el reloj, etc. Me desvisto y me meto a bañar en el baño que está en mi cuarto. Dejo que el agua se lleve mis problemas y salgo, me seco y me acuesto a dormir.

Suena mi despertador, son las cuatro y media de la mañana, tengo que levantarme para estar listo y tomar el autobús de la simón que sale a las cinco y media de la redoma de San Antonio, ya que tengo clase a las siete y media, y a esas horas la cola para ir hasta caracas y llegar a mi universidad son horribles. Llego a la simón, me da tiempo de desayunar antes de entrar a clases, voy y me compro algo en D' Ampere y tomo camino hacia el edifico de aulas, donde tengo clases. Por el camino me encuentro con dos de mis compañeras de clase, Ariana, una leona de 1,60 de alto y 18 años, y María, una gatita gris de 1,70 y 18 años también:

  • Hola Chicas! Como están?- les grito desde lejos

  • Hola Renny! Corre apúrate!- me gritan ambas al mismo tiempo. Y de ese modo salgo corriendo y me acerco a ellas.

  • Hey que más? Que me cuentan?

  • Nada aquí esperando a Beto que dijo que estaba por llegar a la simón en el bus- dice Ariana (les explico un minuto, la simón esta hacia una zona lejana de caracas y los autobuses tardan aproximadamente veinte minutos en llegar desde caracas, si no hay cola), Beto es un Zorro pelirrojo con una manche blanca en el pecho, de 2m de alto, algo raro para su especie, y de 18 años igual que nosotros.

  • Si pero eso nos lo dijo hace veinte minutos- dice María. Pero en eso se escucha un grito a lo lejos.

  • Llegue! hola!- grita Beto desde el otro lado de la calle.

  • Coño hasta que llegaste loco- le digo, simulando que tengo mucho rato con las chicas esperando.

  • pero si tu también acabas de llegar- me dice María.

  • colle, era para reclamarle nada más- le digo algo decepcionado.

  • bueno en fin vamos a aulas a ver si encontramos a alguien más- dice Ariana, y seguimos caminando hasta el edificio de aulas.

Cuando llegamos a aulas, empacamos a caminar hacia donde están nuestros salones, al cruzar la esquina nos encontramos a Robert, un halcón de plumaje marrón, de 1,85 de alto y de 18 años, y a Calisto, un delfín con cabello rubio y mechas verdes, de 1,70 y de 18 años también, hablando sospechosamente cerca.

  • Hey! Hola, que hacen?- los saludo.

  • Ah! Hola, nada! aquí hablando- dice Robert separándose repentinamente de Calisto.

  • Hola! Como están?- nos saluda Calisto.

  • Hola! Bien y tú?- dicen Ariana y María a la vez, riéndose un poco por lo sospechoso de la situación.

  • Bien, esperando a que llegaran para hablar...- dice Calisto, pero de pronto, de la nada, aparece Nacho, un lobo negro de 1,80 de alto y 18 años.

  • Hey!- gritamos todos un poco asustados.

  • Que! los asuste?- dice Nacho.

  • Claro! Si apareces así de la nada, no deberías usar las técnicas ninjas aquí en la simón- dice Beto, recuperándose del susto.

  • Cierto, no deberías, nos vas a terminar matando de un susto- le digo, algo molesto.

  • Bueno lo siento, no era mi intención- dice Nacho con voz de arrepentimiento.

  • bueno no importa ya, tenemos que entrar a clases ya- dice Ariana algo preocupada.

Y hay nos despedimos y cada quien va a su salón respectivo. Luego al mediodía, después de ver todas las clases de ese día, nos encontramos para ir al comedor de MYS (esta enfrente del edificio de Matemáticas Y Sistemas). Empezamos a hacer la cola, tomamos la comida y empacamos a buscar mesa, afortunadamente Beto y María ya habían encontrado una al otro extremo del comedor, lo que yo no me percate es que se había derramado un jugo en el piso, cuando lo pise me resbale y cuando estaba en plena caída aparece de pronto un tigre blanco, de 1,95 de alto, con un cuerpo bien formado y muy ágil, ya que me tomo en el mismo momento en el que estaba por toca el piso y me levanta. Se escucha caer la bandeja y todos voltean a ver, empiezan a gritos en vos unánime, como es típico cuando pasa algo así: Nuevo. Y pienso para mí: que inmaduros son estos animales. Pero en eso me pregunta mi salvador:

-Te encuentras bien?- con voz algo preocupada.

  • Si, no me di cuenta que ese jugo estaba derramado- respondo con voz decepcionada.

  • Bueno, tienes que estar más pendiente de pro donde caminas. Es la primera vez que se te cae la bandeja?

  • Sí, y no se siente bien que te griten así- le respondo y agacho la cabeza.

  • tranquilo a todos nos ha pasado en algún momento. Por cierto me llamo Eduard y tú?- me dice sonriendo. En eso llega un ratón del servicio de limpieza, recoge la bandeja caída y limpia todo.

  • Yo... Renny, Mucho gusto.- y le extiendo la mano. A lo cual responde dándome la suya.

-Mucho gusto. Tienes con que comer? Si quieres vamos a D' Ampere y te invito el almuerzo.

  • bueno, no tengo con que comer, se me olvido agarra dinero hoy en la mañana, pero no puedo aceptar la invitación, no quiero ocasionarte molestia.- le digo por educación.

  • Vamos, que no es molestia, insisto

-Bueno, ok. Te lo agradecería un montón. Solo déjame ir a avisarles a mis amigos y vengo- le digo algo avergonzado.

  • Ok, te espero afuera- me responde con una sonrisa en su cara.

Entonces voy y le digo a mis amigos que voy a comer en D' Ampere, que los veo luego. Salgo del comedor y cuando salgo al sol lo veo a él, no me había fijado por la pena que había pasado, pero se veía espectacular, con una camisa blanca y unos bluejean ajustados, tenía los ojos verdes que resaltaban ante su cuerpo, que no estaba nada mal he de decir. Pero continuando, en eso el me hace una seña dando a entender a lo siguiera hasta D' Ampere, lo cual hice sin pretexto alguno, llegamos compramos los tiques en caja, pedimos la comida, y nos sentamos en uno de los muritos que están alrededor de D' Ampere y empezamos a comer. En eso el me pregunta:

  • Que carrera estas estudiando?

  • Yo... Ingeniería en Computación, y tú?- le digo algo avergonzado.

  • Yo estudio Arquitectura, ya entiendo porque no te había visto antes- responde poniendo una expresión de descubrimiento.

  • Claro! tú ves cosas muy distintas a las que yo veo- le digo aun avergonzado. Les explico rápido, en la simón casi todos vemos lo mismo los primeros trimestres, con excepción de los de biología, arquitectura y otra hay que ahora no recuerdo.- oye, gracias por el almuerzo, no tenias que haberlo hecho.

  • No tenia, pero quise, me caite muy bien desde el momento en el que... te caíste- me dice riéndose.

  • no te burles, me siento mal, no había pasado una pena así nunca.- y agacho la cabeza.

  • lo siento, bueno cambiando un poco el tema, cuéntame que te gusta?- y así sigue la conversación por un par de horas. Por supuesto, luego no me encontré con mis amigos, y me fui con Eduard hablando en el autobús, resulta que nuestros horarios eran los mismos solo que él veía las clases en otros edificios, una grata sorpresa para los dos, ya que en esas horas habíamos hecho una conexión muy fuerte. Luego de ese día, empecé a ver más a Eduard, lo integre a mi grupo de amigos, y ellos lo aceptaron muy bien. Lo veía todos los días, almorzábamos todos juntos, hablábamos gran parte de la tarde, salíamos al cine todos juntos, etc. con excepción de los jueves, día en que él tenía practica de natación, esos días después de almorzar nos despedíamos. El me insistía que me metiera en natación con él, ya que a mí también me gustaba, pero yo me negaba, no sé porque, pero simplemente no quería.

Un día todos querían ir a una disco, para pasar hay algo de rato y divertirnos, pero como yo vivía tan lejos se me hacia complicado. Luego de discutirlo un poco, Eduard me ofreció que me quedara a dormir esa noche en su casa, lo pensé algunos segundos y acepte, llame a mis padres para que supieran lo que iba a hacer y ya todo listo, no había ningún problema ya que era viernes. Nos fuimos a la disco divertirnos, aran casi la una de la mañana cuando decidimos irnos. En ese momento nos dimos cuenta que no teníamos forma de volver a nuestras casas, grave error ocasionado por la emoción de la salida. Bueno al final resolvimos, unos agarraron un taxi, otros llamaron a sus padres, Eduard y yo nos fuimos caminando, ya que él vivía cerca de ahí. Durante el camino, hablábamos, gritábamos, parecíamos un par de borrachos, yo más que el ya que había bebido muchísimo. Llegamos y me doy cuenta que estamos en Los Ruices, a unas calles de la casa de mi abuela, nos paramos en un edificio y Eduard saca las llaves y abre, una vez en el ascensor el marca el PH, me impresiono un poco ya que el no parece ser una persona que vive en un PH, pero si, llegamos abre la puerta y sale de repente un tigre de unos 48 años que dice:

-Eduard! Estas son horas de llegar a la casa- algo molesto.

-lo siento papá, es que unos amigos y yo fuimos a la disco, y se nos paso el tiempo volando- le responde claro, como si no hubiera bebido en toda la noche.

  • Bueno la próxima vez avisa lo que vas a hacer, y de paso traes invitado y no avisas. Por cierto quien es tu amigo?- le dice con voz calmada pero a su vez de intriga.

  • Yo soy... Renny, un compañero... de su hijo- le respondo, pero no puedo ocultar me embriagues.

  • Ah! Tu eres el tal Renny, mucho gusto, yo soy Henry rojas, el papa de Eduard...- y no escuche mas nada, caí inconsciente.

Cuando despierto a la mañana siguiente, con la resaca más grande de este mundo, e intentando recordar lo sucedido la noche anterior. De pronto recuerdo que esa noche me iba a quedar en casa de Eduard, abro los ojos y no reconozco la habitación, estoy acostado en la cama, en ropa interior, pero yo solo. En eso entra Eduard con una toalla por la cintura y busca ropa que ponerse, me quedo atónito ante el cuerpo que tengo el gusto de ver, es un adonis en persona, todo el cuerpo fibroso y bien marcado, y se veía mejor mojado. El aun cree que estoy dormido, deja caer la toalla, está de espaldas, veo el perfecto trasero que tiene, y me quedo impactado. Por error se me salió en voz baja un "Dios!", y se volteo, yo me asusto y me tapo con la sabana y me vuelvo a hacer el dormido, lo único que escucho es una risa bajita de parte de Eduard y el sigue con lo suyo. Luego de vestirse, se me sienta a un lado, y haciéndose el que no sabe, me empieza a despertar, yo me destapo la cara y lo veo, me sonrojo un poco y hago el que me estoy despertando. En eso Eduard me dice:

  • Vamos levántate, ya vamos a comer, la asistenta está preparando el desayuno- me lo dice con una voz tierna, casi angelical.

-Ammm... ok, ya voy, ya me levanto- le respondo imitando la voz de dormido.

  • ok, sobre la mesa tienes una toalla y algo que ponerte, ve báñate para que se te pase la resaca y te esperamos en la mesa- señalándome una mesa en la parte inferior de la cama. En eso me percato que no hay otra cama en el cuarto y le pregunto:

  • Tu donde dormiste? no me dirás que en el piso.

  • pues si, dormí en el piso. Luego que te desmallaste, decidí que tú durmieras en la cama.- me responde con una expresión de "obvio" en la cara.

  • Discúlpame, no debiste haber hecho eso.- le digo avergonzado.

  • nada de discúlpame, tu eres mi invitado, te mereces lo mejor- me dice algo molesto. Y luego dice en voz baja - y más aun siendo tú- me quedo desconcertado, me hice el que no escuche y le pregunte:

-que dijiste que no te escuche?

-Nada, nada. Mira tus celulares, Ipod, etc. están en la mesita de noche, ok? Te espero en la mesa.

Y entonces se levanto y se fue. Yo me quede un minuto más en la cama, flojeando y también pensando en lo que le escuche decir, me tenía intrigado. Entonces me levante, tome la toalla y me metí a bañar, me tenia sumamente intrigado, pero el agua me quito las preocupaciones y parte de la resaca. Salí, me seque y me puse la toalla a la cintura. Fui al cuarto de Eduard, cerré y deje caer mi toalla, repentinamente escucho abrirse la puerta, pero se cierra al instante, no me percato quien fue. No le doy importancia y me visto, no me pongo ropa interior ya que está muy sucia. Toda la ropa me queda gigante, toda es de Eduard. Veo un montoncito de ropa en la esquina y veo que es la mía, pongo mi ropa interior con ella y salgo a la sala. La casa es impresionante, todos son mueble que por lo visto son carísimos. De pronto escucho que me llaman, es Eduard desde la mesa para que me siente. Me siento y me dice:

  • lo siento- y se sonroja un poco.

  • porque te disculpas no entiendo- pero en realidad si entiendo, fue él quien abrió la puerta y me vio.

  • yo fui quien abrió la puerta. Te juro que no vi nada!- ya en este punto está casi tan rojo como un tomate.

  • descuida, es tu cuarto e igual yo no tengo nada que tu no tengas. Jajaja!- entonces el se ríe conmigo.

  • por cierto, pusiste toda tu ropa junto, no?- me pregunta.

  • sí, porque?- le pregunto.

  • la asistenta te la va a lavar, para que la tengas limpia y te cambies cuando quieras, ya que te queda un poco grande lo que te preste- y se ríe.

  • si un poco- y levante el brazo mostrando como cae el exceso de la franela que tengo puesta, Entonces empezamos a reír. En eso entra el padre de Eduard diciendo:

-Buenos días! Veo que se levantaron de buen humor. Como estas Renny?

  • bien Sr. Henry, nos reímos de cómo me queda la ropa de su hijo- le respondo.

  • me alegro, y me sorprende que recuerdes mi nombre, después de cómo te desmallaste anoche. Eduard se preocupa muchísimo- me dice con expresión de asombro.

  • Ya papá, no es para tanto- le dice Eduard y se sonroja un poco.

  • Bueno, Sr. Henry creo que sería normal que se preocupara, yo me preocuparía si se desmalla Eduard teniéndolo al lado, me podría aplastar- y rompemos todo en risa. Pero somos interrumpidos por la asistenta la cual trae los platos del desayuno, y Eduard le dice lo de mi ropa.

El resto de la mañana fue normal, la pasamos hablando, riéndonos, estuvimos en la computadora de Eduard, etc. Al mediodía almorzamos y la asistenta tuvo lista mi ropa, asi que me cambie. La tarde fue igual hasta como las cinco en que le dije que me tenía que ir, pero me dijo que él me llevaba, acepte. Cuando bajamos a buscar el vehículo, me quede boquiabierto cuando veo que es un Chevrolet Avalanche 2007 negro, me vehículo favorito. En eso Eduard me dice:

-Que te pasa?

  • Dios! No puedo creer que tengas esta camioneta, ese es mi vehículo soñado. No puedo creer que seas tan perfecto...- me doy cuenta de mi comentario y me sonrojo.

  • explícame cómo es eso?- me pregunta algo sonrojado. Pero no me atrevo a explicarle.

  • no nada, olvida lo que dije- es lo único que le respondo. Luego no cruzamos más ninguna palabra, solo las necesarias para que me deje enfrente de mi edificio. Nos despedimos y le digo que nos vemos el lunes.

Las semanas fueron pasando, pero mi rutina cambio un poco, ahora los jueves me iba a la piscina a ver a Eduard en sus prácticas, a degustar ese caramelito solo con la vista, en muchas ocasiones tenia que salir corriendo al baño ya que no aguantaba más y me corría sin tocarme. Poco a poco fui sintiendo algo extraño por él, bueno realmente ya lo sentía pero al pasar el tiempo lo sentía más fuerte. Una noche divagando por mi cabeza recordé que era ese sentimiento, estaba enamorado!, no lo podía creer, tenia tantos años que no me enamoraba que no recordaba cómo se sentía, pero esta vez cambio algo, era de un hombre que me había enamorado, ya había estado con alguno, pero en realidad nada serio, algunos besos no más, nunca me había enamorado, solo me llamaban la atención y ya, me sentía algo, no, muy confundido. Tenía miedo, nadie sabía de mis preferencias sexuales más que mis amigos más cercanos, como iba a hacer. Empecé a preocuparme demasiado, pero luego pensé: -no te enrolles, luego ves como resuelves, por ahora disfruta lo que tienes- funciono, la preocupación se fue, pero había otro detalle, no sabía si Eduard sentía lo mismo que yo. Tenía algunas sospechas de que si sentía lo mismo, por lo sucedido aquel día que me quede en su casa, pero por muchas sospechas que tuviera no lo podía confirmar. Concluí que mejor era esperar a ver qué sucedía.

Tuve que esperar menos de lo que me imaginaba, a la semana siguiente, durante la práctica de natación de Eduard, paso lo mismo que en otras ocasiones, no pude evitarlo. Tuve que ir a los baños lo más rápido posible, pero ocurrió que estaban en remodelación, rayos! ahora como hago. Me acorde que la piscina está al lado del gimnasio y que hay habría baños, estaba en lo correcto. Entre y todo normal, pero lo que no me percate es que Eduard me había seguido, y se dio cuenta de lo que me sucedió. Tú sabes, uno de esos momentos "trágame tierra", no podía creerlo, estaba ahí enfrente de mí, escurriendo agua como la primera vez que lo vi. Lo único que se me ocurrió fue encerrarme en uno de los WC y pedirle que se fuera, no quiso, empezó a hablarme.

  • Renny, abre por favor, tenemos que hablar- Eduard golpeaba la puerta.

  • No! Vete! déjame aquí.

  • sal coño tenemos que hablar, no entiendes que...- se queda callado de repente. Me quede frio, no entendía porque se quedo callado, se habría ido? Lo único que se me ocurrió fue abrir la puerta y asomarme. Gran sorpresa la mía cuando me agarra por el brazo, me saca del WC, y me abraza. Lo único que atine a pensar fue, caí en su trampa, pero luego se me olvido todo, estaba donde más quería, entre sus fuertes brazos, estaba que me derretía. Pero tenía que poner resistencia o sería muy evidente, empecé a moverme para que me soltara, me soltó. Pero lo único que se me ocurrió fue quedarme hay parado enfrente de él, pero mejor que fue así, él empezó a hablar:

  • ...yo no sé si será lo adecuado, no sé si es el momento, pero no puedo guardármelo más...- me toma por el brazo y me acerca a él, yo no hago nada, dejo que el haga.

  • ...no sé si tú sientes lo mismo, no se muchas cosas, estos últimos días me he hecho un nudo la cabeza y esta idea no me la puedo sacar de la cabeza...- se sonroja y agacha la cabeza, y yo sigo sin hacer nada, bueno en realidad estoy pasmado, aun no puedo creer, no, no entiendo lo que está pasando, aun tengo que procesarlo. Pero él continúa:

-...pero es que desde el momento en el que te conocí sentí cosas muy raras, no podía entenderlo, el día que te quedaste en mi casa no pude dormir en toda la noche por el simple hecho de que estabas hay, estabas al lado mío, no lo podía creer. Pero esa noche lo entendí, ya sabía que era lo que tenia que hacer, pero no me atreví hasta que...- lo interrumpí, ya había entendido, ya estaba consciente de lo que él estaba diciendo. Se me ocurrió interrumpirlo, pero no fue una simple interrupción, lo que hice fue besarlo, no podía evitarlo, ya lo había confirmado. Con todo lo que dijo entendí, el sentimiento era mutuo. El también estaba enamorado de mí, y por primera vez me sentí completo. Ese beso duro aproximadamente treinta segundos, pero para mí fue la eternidad. No podía creer lo que yo había hecho, pero cuando nos separamos, el se quedo callado. Me pareció que no hice lo correcto, pero fue solo mi impresión, el estaba procesando lo que había sucedido, lo agarre de sorpresa, es normal. Luego que entendió, me agarro entre sus brazos y me abrazo. Estuvimos así un rato, no sé como cinco minutos, hasta que nos interrumpió un sonido extraño, como si algo se hubiera movido porque lo tropezaron, pero por más que buscamos no vimos nada. Bueno ese día, Eduardo volvió a la piscina solo a buscar las cosas, no le dio explicaciones al entrenador ni nada, nos fuimos en la camioneta del papá de Eduard, siempre los jueves el papá de Eduard se la prestaba para que no tenga que irse en el bus de la simón ya que salía tarde de la práctica. Durante todo el trayecto íbamos callados, el decidió llevarme hasta mi casa, no le dije nada, estaba esperando a que el hablara. Cuando llegamos a mi casa no paro enfrente de mi edificio, siguió unas curvas más hasta un terraplén que había cerca y se paro hay. El silencio siguió por un par de minutos, los dos estábamos esperando lo mismo, a que el otro hablara. Yo tome la iniciativa, y dije lo primero que se me vino a la cabeza:

  • y... que vamos a hacer... con esto?- le dije, con la vos entrecortada.

  • no sé... esperaba a que tú me lo dijeras- y me vio a los ojos. No pude resistirlo, me acerque a él y le di otro beso. No me importaba nada en ese momento, estábamos solo él y yo. Perdí la noción del tiempo, no sé si estuvimos segundo, minutos o horas, lo que sé es que no me quería ir de su lado. Nos separamos y le dije:

  • sabes, no importa lo que vallamos a hacer con esto, disfrutémoslo al máximo.

  • pero, y el qué dirán?- me pregunta algo preocupado.

  • a esta altura, ya no me importa el que dirán, quiero estar contigo, eso y nada más.

Entonces nos bajamos de la camioneta y nos montamos en la parte de atrás. Nos habíamos distraído tanto que ya hasta había anochecido. Nos acostamos atrás y observamos las estrellas y nos abrazamos, estuvimos como media hora sin hablar. Luego empecé a pensar en nuestros padres, y le pregunte:

  • tu papá sabe que tu... bueno tu me entiendes...- y él me interrumpe o mejor dicho completa la frase.

  • que soy gay, no del todo, pero se los sospecha, porque desde el día en que te quedaste en mi casa me dice muchas cosas raras, creo que ese día me delate.- nos reímos juntos.

  • es que fuiste muy descarado...- y me interrumpe reclamándome:

  • descarado tu, que me viste completamente desnudo después que me bañe y luego simulaste que estabas dormido.

  • fue tan descarado...- me sonrojo.

  • si, por eso entre luego yo y te vi, para estar a par. Pero luego me sentí mal, porque lo tuyo fue accidental y yo lo hice apropósito.

  • bueno, pero te entiendo... bueno, no sé que entiendo, pero estamos a par, eso es lo que importa.

  • no del todo, yo si vi todo, tu no viste todo...- y le doy otro beso.

  • y habrá su tiempo, luego nos ponemos a par, por hoy llévame a mi casa que ya es tarde.

Y saben eso ultimo lo dije pro decir, porque no había visto el reloj, pero cuando lo vi, me quede loco, eran ya las doce de la noche. Como que el tiempo vuela cuando estas con quien quieres, no?

Bueno cuando llegamos a la entrada de mi edificio me bajo, cierro la puerta y me quedo apoyado en la ventana, el se queda un poco extrañado. Entonces le digo:

  • sabes, tenia tanto tiempo soñando con este momento que me parece mentira que haya sucedido.

  • a mi igual, pero mejor que sucedió y no dejamos que pasara.

  • es muy cierto...- en eso él se acerco y me beso. Luego de eso me quede mudo.

  • bueno, chao...- entonces yo lo interrumpo y le digo:

  • te amo- se quedo frio, no supo que decirme. Pero luego de unos segundos yo continuo: - bueno amor, que lindo suena, nos vemos mañana- el sigue callado, solo acelera y da la vuelta, se vuelve a parar enfrente de mi edificio y me dice:

  • yo también te amo- me besa y se va, y cuando avanza un poco escucho un grito, era él, y a que no saben que grito? En palabras textuales "te amo amor, te amo solo a ti Renny". Ok, fue algo imprudente se pudo haber enterado todo el mundo, pero no importa, fue muy lindo que lo gritara así. Ese día dormí como un gatito y me desperté feliz al día siguiente, era viernes y podía pasar toda la tarde y la noche con mi amor, baje feliz y contento. Llegue a la simón con una sonrisa de oreja a oreja, dio la casualidad que todos mis amigos habían llegado más temprano de lo normal y ya estaban todos hay, cuando llegue todos se me quedaron viendo, no entendía. Se me quedaron mirando y no decían nada, solo salió Ariana y me dijo:

  • hasta que no nos lo digas, no te vamos a hablar- con voz de regaño y todo.

  • Que les diga qué? no entiendo, que paso? que hice?- y puse mi cara de cachorrito triste, a ver si se ablandaban, pero resulto que no.

  • tenemos que oírlo de tus boca, o de sus bocas- dijo Calisto. Y ahí lo entendí todo, se habían enterado, pero como, ese ruido que se escucho en el baño cuando Eduard y yo nos besamos por primera vez, pero quien, como, seguía algo sorprendido. En eso llego Eduardo y se quedo igual que yo cuando los vio como me estaban tratando. El también entendió a que se refería, pero ninguno de los dos se atrevía a decir nada.

  • Coño, que yo los vi, díganlo y ya- dijo Nacho para resolver todo.

  • bueno, que... mejor dilo tu Eduard.

  • Bueno, pues que... no dilo tu, ellos fueron primero tus amigos.

  • no es justo. Pero ya va, si ya lo saben solo tenemos que decirles... coño que si, lo que les dijo Nacho es verdad. Eduard y yo estamos juntos, y si no les gusta, lo sentimos- y empezó una euforia total, todos nos felicitaban, se nos tiraban encima.

  • lo sospechaba, ustedes se comportaban siempre muy extraño- dijo María.

  • y desde hace cuanto están juntos?- pregunto Beto.

  • desde ayer... porque lo preguntas?- le respondí.

  • enserio? entonces son tremendos tontos, nosotros nos dimos cuenta que estaban mutuamente enmarados desde hace tiempo- dijo Robert.

Después de esto no hay mucho más que contar para este capítulo. Solo la forma en que Nacho lo descubrió.

Bueno, resulta que, como me lo pasaba tanto con Eduard, no me había enterado que mi amigo nacho, el lobo negro, se había metido en el gimnasio de la universidad y se quedaba los jueves en la tarde a entrenar. Resulta que él me vio cuando entre al edificio del gimnasio directo al baño, y vio que Eduardo me estaba siguiendo. Entonces no se le ocurrió otra idea más que, usando sus técnicas ninjas, colarse al baño y ver qué pasaba. Y que sorpresita se llevo cuando vio lo que vio, de ahí el ruido que escuchamos, fue él quien se tropezó cuando estaba saliendo.

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Bueno hay esta, ya la lelleron, dejen su comentario, su critica, su queja, lo qu sea, espero mañana poder publicar el segundo capitulo, ultimamente estoy muy inspirado, gracias de nuevo a Alfred Sherford por su inspiradora serie "el lobo guardian", la cual me animo a escribir esta.

finalmente esta historia se la dedico a mis amigos, que aunque no puse sus nombres, para asegurar su privacidad, use sus personalidades y rasgos resaltantes, de verdad muchas gracias por apoyarme chicos.